El pintor Baldomero Galofre 

 

VIII. EXPOSICIONES PÓSTUMAS

 Tras el fallecimiento del artista, su viuda se quedó carente de suficientes recursos,  por lo que sus amigos decidieron organizar una exposición homenaje al pintor que le proporcionaría  una  fuente de ingresos económica, estando todas las pertenencias expuestas  a la venta

Con tal motivo se crearía la Comisión promotora de la exposición de obras póstumas de Baldomero Galofre, a la cual la junta de museos de Barcelona facilitó una de las Salas del Palacio de Bellas Artes para celebrar la exposición que organizó el grupo de amigos incondicionales  del fallecido artista.

  Parece ser que la viuda tuvo varias ofertas más ventajosas del extranjero pero prefirió realizar finalmente la muestra en Barcelona.

La exposición tuvo lugar  del 3 de octubre hasta el 31 de diciembre de 1903, siendo compradas numerosas obras por importantes coleccionistas y después de su clausura fueron adquiridas algunas obras para los  museos[1].

Se realizó un catalogo en el que se destaca sobre todo  el discurso necrológico realizado por Francisco Casanovas [2], así como unas revelaciones íntimas publicadas póstumamente del pintor[3]. Como anuncio de la exposición se editó un bello cartel litográfico   realizado por Juan Llimona y Antonio Utrillo.

Le exposición consistió en  una autentica albacea sobre las  pertenencias del artista, en la que se incluían 565 dibujos, 35 acuarelas y 20 óleos. Además también se ponía a la venta su pinacoteca particular de esculturas y pinturas de artistas españoles como Más y Fondevila, Fabrés, Segundo Matilla, Eliseo Meifren y Pinazo. Entres los artistas italianos se encontraban entre otros, obras de Paolo Vetri, Doménico Morelli, Dalbono y Mancini. La exposición la completaba las pertenencias particulares del artista, incluyendo muebles, cerámicas, pistolas  y lámparas.

La comisión promotora hizo llegar varias cartas a diversas instituciones invitando a adquirir las obras, como la dirigida al Ateneo Barcelonés en la que se indicaba que su asociación contribuirá, aceptando esta invitación y quedándose con las obras que estime convenientes a aumentar la cantidad que se ha recaudado para la viuda del artista.[4]

 El 15 de febrero de 1904 se realiza un concierto vocal e instrumental dirigido por Delfín Armengol  a la memoria del artista fallecido y como clausura de su Exposición homenaje en el palacio de Bellas Artes[5]

 

La exposición tuvo varias críticas como la de Raimundo Casellas[6] y un recordatorio de Narcis Oller[7] en La Ilustració Catalana que le concede la portada mediante un dibujo al carbón de Ramón Casas.

 

Más adelante  en septiembre de 1904  se le dedicaría como póstumo homenaje al pintor una de las salas del Palacio de Bellas Artes de Barcelona, pasándose a denominar “Sala Galofre”. Decisión que no agradó en absoluto a Sebastiá Junyent que arremetió duramente contra esta decisión.[8]

 

También con motivo de su fallecimiento, en la ciudad de  Buenos Aires, don José Artal le organizaría una exposición homenaje que tendría lugar en el mes de noviembre de 1902[9].   Se presentaron las obras Regatas de Sorrento, Las lavanderas, En la venta del Carmen y Coso de Gitanos junto a numerosos carbones y dibujos[10]. El periódico La Nación de Buenos Aires, le publica un suplemento ilustrado con un texto firmado por don José Artal.[11]

 

También es de mencionar, aunque fue de  reducidas dimensiones la exposición póstuma que organizó la   Sección Artística de la sociedad del Centro de Lectura de Reus en septiembre de 1902.[12]

Igualmente el ayuntamiento de Reus decidió cambiar la denominación de la calle del Cementerio viejo de esta localidad por la de Calle del pintor Baldomero Galofre si bien no estuvo exenta de criticas tal decisión al entender que  la calle en cuestión no corresponde a la importancia de los méritos conquistados por el artista.[13]

 

En Roma, el pintor Manuel Benedito (1875-1963) realizaría un retrato de Baldomero Galofre con el fin de completar el catálogo de la Galería de retratos de los pensionados, colección que se  había comenzado a fraguar en 1896 y que se iría completando en años sucesivos  con la idea de reunir todos los artistas que tuvieron la honra de pertenecer a ese instituto.[14]

 

Posteriormente en 1923, en el nuevo emplazamiento del Ayuntamiento de Reus se ubicarían varios cuadros del artista en el despacho del alcalde, junto a la espada del general Prim.[15]

 

También en Reus, bastantes años más tarde, en 1946 y coincidiendo con el centenario de su nacimiento, se realizaría un acto de homenaje a Baldomero Galofre  a iniciativa de la emisora de radio de la mencionada localidad

La idea era producir una serie de programas sobre personalidades reusenses y la emisión se efectuó desde el nuevo salón de actos del Palacio Municipal, radiándose por radio Reus y radio Barcelona.[16]

La propuesta fue bien acogida por el Ayuntamiento y bajo la presidencia del Teniente de alcalde Jaime Cardoner se reunió la comisión promotora el 5 de diciembre[17] que decidió que el acto de homenaje consistiría en un discurso leído por don César Ferrater y Pons que tuvo lugar el 13 de diciembre.[18]

Finalmente, en 1985 el ayuntamiento de Reus bautizaría a la antigua calle del Fossar Vell como  calle Baldomero Galofre...  [19]

Por su parte, el ayuntamiento de la  ciudad de Badalona decidiría en la sesión del 24 de octubre de 1939 denominar la antigua Avenida Viñas por la de Baldomero Galofre dentro de un ambicioso plan por dedicar  sus calles a personajes de la cultura.[20]

 

Finalmente hay que reseñar más recientemente en el ámbito privado la exposición monografía dedicada al pintor celebrado en la Sala Rebull de Reus en junio de 1989.[21]

 

 

VALORACION CRÍTICA  POSTERIOR DE LA OBRA DE GALOFRE

 

Con motivo de la exposición retrospectiva de 1903 de Barcelona, surgirían varias posturas enfrentadas entre los partidarios y los detractores de su arte.

 Pero hay que señalar que a causa del prematuro fallecimiento del artista, la dimensión de su complejo legado no tuvo el suficiente  espacio de tiempo que es necesario dejar transcurrir y  dejar reposar para elaborar posteriormente y desde una perspectiva más lejana, una certera y objetiva crítica del mismo. De hecho su exposición coincidía en Cataluña con el momento álgido de las corrientes  modernistas que propugnaban una escala de valores totalmente diferentes a las  defendidas por el artista.  Por este motivo, en algunos sectores de la esfera intelectual – el caso de Sebastián Junyent  sería uno de ellos - la exposición pudo percibirse un tanto desfasada para los gustos estéticos del momento.

Y por este motivo, su amigo el escritor Francisco Casanovas desde Pel & Ploma[22]  ante las criticas recibidas, salía en defensa del artista. El autor, haciendo un paralelismo ante tal injusticia, incluso llegaba a comparar las atrocidades y atropellos que se habían cometido en el transcurso de la historia del arte, como era el caso  de la llegada de los nuevos estilos  que se imponían  originando a su vez el desprecio y rechazo de los estilos antiguos.  Casanovas lo ejemplificaba  señalando como los cristianos destruían todo lo pagano o como los renacentistas destruían toda la tradición ojival.

El autor continúa defendiendo al artista  arremetiendo por la supuesta acusación  que pintaba a la italiana, -término que se refería entonces en tono despectivo y caduco- y también por la presunta falsedad de contenido de sus obras.

Casanovas sustenta  y reivindica la valía de Galofre  en su individualidad, en haberse singularizado del resto de los pintores y en haber adquirido un carácter artístico único y personal, virtudes que encontraba a faltar en el arte de este momento. Concluye afirmando que

Desde en Fortuny i en Mercadé no había baixat a la tomba una gloria tan Llegítima, y no anem tant sobrats d´homes.

 

 

 En el ámbito de los críticos defensores de posturas más avanzadas,  sería sobre todo  Ramón Casellas el que definiría con  el siguiente acertado texto cuanto habían variado los valores estéticos de una época, matizando sin embargo, que en la transformación incesante de gustos e ideas, la historia de hoy no puede borrar las de ayer.

Desde aquellos días se han girado las corrientes del arte... El amor a la pompa pintoresca, se ha transformado en sencillez y sobriedad;  la fantasía, verismo; la exterioridad, sentimiento intimo; la exuberancia, recogimiento; el espectáculo alegre, visión melancólica: la Andalucía alegre, la Andalucía triste; los panoramas poblados de gente, rincones abandonados y solitarios; y hasta el concepto de la ejecución ha saltado de un extremo a otro, y en lugar de pregonarse las excelencias de la habilidad, del garbo, del mecanismo, se ensalzan las virtudes del  poco trazo, de la “gaucherie”, de la mano torpe.[23]

 

En la misma línea, una crítica todavía más contundente y voraz  la realizaría Sebastía Junyent desde el semanario catalanista Joventut[24]En Galofre gosá de bona nomenada, sobre tot durant sa Joventut, quan encaixavan de ple ab el gust de molts las qualitats efimeras del seu art. Després, ab els cambis d´orientació y ab l´indisctutible avens que a Europa prenmgué l´art pictorich, se considerá sa obra com a obra superficial, dirigida principalment a seduhir al comprador. Sigui com vulga, actualment se´l pot judicar a sang freda y concloure, sense por d´equivocarse, qu´estava molt lluny d´esser una eminencia en l´art de la pintura.

 

Para el articulista que firma J.P. afirma que... Galofre fou admirat per sos companys y per bona part del públich d´aquells temps; avuy las novas tendencias del art pictórich l´havian deixat enrera y fins podém dir qu´ell mateix s´havía estacionat en sa marxa empresa; més es innegable que dins del géneros que conrehua en Galofre, ben prompte´s feu l´amo y senyor d´una personalitat molt remarcable.[25]

 

Respecto a los críticos y escritores españoles de su época, Galofre tuvo como sus principales defensores a García Llansó, Balsa de la Vega, Miquel i Badía, Luis Alfonso, Emili Vilanova, Joan Sardá, , José Güell y Mercader, Pirozzini y sobre todo al mencionado Francisco Casanovas.

Y si bien en un principio, Narcis Oller y Josep Yxart ensalzarían su inicial naturalismo, posteriormente se desmarcarían ante la llegada de las propuestas modernistas.

Finalmente, Raimon Casellas y Sebastián Junyent diferirían por completo de sus planteamientos estéticos.

 


  

[1] P. BOHIGAS TARRAGÓ “Apuntes para la historia de las exposiciones oficiales de Arte de Barcelona.” Anales y Boletín de los Museos de Arte de Barcelona. Barcelona 1945.

 

[2] FRANCISCO CASANOVAS. Necrología del ilustre pintor catalán Baldomero Galofre leída el 15 de noviembre, en la solemne apertura de la exposición de sus obras en el Palacio de Bellas Artes de Barcelona, por D. Francisco Casanovas, individuo de la Comisión promotora. Exposición Galofre en el Palacio de Bellas Artes de Barcelona . Barcelona 1903.

 

[3]Durante mi vida he amado siempre la soledad, cuyo ambiente es el que más se adpta á mis sentimientos, y en mis excursiones artísticas, nunca o casi nunca he llevado compañía.

Delante de la Naturaleza quiero estar solo.

Quiero mucho a los amigos, y si he recibido alguna ofensa, la he perdonado.

Adoro con preferencia la mujer, los niños, las flores y los animales.

Entusiasta por las ciencias, pruebo grandes sensaciones a todo descubrimiento útil para la humanidad.

Soy perezoso para leer, prefiriendo siempre la lectura de revistas científicas y biografías de hombres ilustres.

La música me conmueve y arrebata y en ciertos periodos de nostalgia acudo a ella, como remedio eficacísimo.

Idolatro la familia y sacrificaría mi vida por ella.

En Arte, no he tenido preferencia por determinada escuela.

No he hecho jamás una copia porque la considero inútil, así como tampoco he consultado un libro para hallar un asunto.

Para mí la Naturaleza habla y lo dice todo.

No admito jerarquías ni géneros en la pintura, puesto lo que diga “algo” al corazón es obra de arte.

No me gusta la pintura histórica por ser en muchos casos, mentirosa, y un medio muy eficaz de que se valen los artistas de mediano ingenio que estan “enfermos de celebridad” acudiendo a ella por ser lo que generalmente impresiona más al vulgo, y a las muchedumbres de platea. Al primero porque no entiende nada de “lo que se dice”, y a las segundas, por querer entender más de lo que “se le dice”.

Le es más fácil al hombre entender las canciones vivas nerviosas, palpitantes de la Naturaleza, que no esa pintura problemática, sistemática y fría que no tiene otra salvación que la paleta.

Quisiera que las Academias fueran reformadas por completo con una enseñanza académica a la verdad,

pues hoy tal como están constituidas, solo `producen un gran numero de trabajadores más o menos hábiles que aprenden “a hacer” cuadro, siendo muchos “desgraciados” víctimas de esas instituciones.

Me tomo mucho interés por la política, siendo partidario acérrimo de las ideas que contribuyen al bienestar moral, social y material de la humanidad.

Poseo títulos honoríficos y caballerescos, que he aceptado por no mostrarme descortés.

Cuando he dado consejo u opinión, he dicho sinceramente la verdad.

Amo el Arte como a mí mismo, y temo la muerte, por el egoísmo de no poder consagrarme á el eternamente.

(Baldomero Galofre)

 

 

[4] Carta de la Comision Promotora de la Exposición de obras póstumas de Baldomero Galofre al Ilustre presidente del Ateneo Barcelonés, Barcelona 15 de enero de 1904.

 

[5] La Vanguardia, Barcelona 15 de febrero de 1904

 

[6] “Exposició Galofre al Palau de Bellas Arts”., La Veu de Catalunya, Barcelona 20 de noviembre de 1903.

 

[7] “Galofre.” La Ilustració Catalana, Barcelona, 22 de noviembre de 1903.

 

[8] SEBASTIÁ JUNYENT “La sala Galofre”. Joventut, Barcelona, 27 octubre 1904.

 

[9] XIIª Exposición Artal. Salón Witcomb Buenos Aires MCMII

 

[10] JUSTO SOLSONA  “Republica Argentina. Buenos Aires. Exposición de pintura española contemporanea organizada por D. José Artal a la memoria de Baldomero Galofre.”La Ilustración Artística, Barcelona, 5 de enero de 1903.

 

[11] “Un tributo a Galofre” en La Vanguardia, 6 diciembre 1902 (transcribe el articulo de el periodico La NAcion de Buenos Aires)

 

[12] Estaba compuesta basicamente por dos carbones y una acuarela que el artista había donado con anterioridad al ayuntamiento, algunos pocos cuadros de particulares entre los que destacaban los paisajes propiedad  de Domingo Soberano y el famoso cuadro Recuerdo de Galicia que adorna permanentemente los locales de la sociedad. Revista del Centro de Lectura. Reus. 1 de septiembre de 1902.

 

[13] “Notas regionales. Reus” en LA Vanguardia, 21 agosto 1902.

 

[14] JUAN Mª MONTIJANO GARCÍA “La galería de retratos de pensionados” en La Academia de España en Roma. Madrid 1998.

 

[15] M.T. PITARCH MORELL. Institut Salvador Vilaseca. Reus 1999

 

[16] El acto de homenaje coincidía tambien con los realizados a José Llovera, Eugenio Mata y Francisco Bartrina.Cuatro personajes reusenses que nacieron en el mismo año que Galofre. “Acto de homenaje a unos reusenses ilustres”. Diario Español de Tarragona. 24 de octubre de 1946

 

[17] “Acto de homenaje a unos reusenses ilustres”. Diario Español de Tarragona. 6 de diciembre de 1946.

 

[18] “En memoria del pintor Baldomero Galofre. Extracto del discurso pronunciado por D, César Ferrater y pons en la Sesión Académica celebrada en el Palacio Municipal el dia 13 del corriente”. Diario Español de Tarragona. 18 de diciembre de 1946

 

[19] R .AMIGÓ ANGLÈS,. Materials per a l´estudi dels noms de lloc i de persona, i renoms, del terme de Reus, Reus 1988  (calle Baldomero Galofre)

 

[20] Archivo Municipal del Ayuntamiento de Badalona. Despacho ordinario.24 octubre 1939.

 

[21] Catalogo exposición. Baldomer Galofre. Del 9 al 29 de juny de 1989. Sala Rebull. Reus 1989

 

[22] FRANCISCO CASANOVAS. Pel&Ploma. Enero 1903

 

[23] RAMÓN CASELLAS. ”Exposició Galofre al Palau de Bellas Arts”. La Veu de Catalunya. Viernes 30 de noviembre de 1903.

 

[24] SEBASTIÁ JUNYENT “La sala Galofre.” Joventut, Barcelona, 27 octubre 1904.

 

[25] J.P. “En Baldomero Galofre” La Renaixensa, Barcelona, 9 agosto 1902